lunes, 11 de agosto de 2014

EL LIDERASGO DE SERVIR




EL LIDERÁSGO DE SERVIR
Lc. 17:7-10.     Escrito por el pastor Reinaldo, consejero matrimonial                 y familiar
INTRODUCCION:
Es posible que el 60% de la población romana, eran esclavos. Los esclavos, no tenían derecho de  nada; no merecían consideración. Nadie considera lo que es su deber y obligación hacer. No tenían derecho de escoger.
Siervos o jefes
1º Los  apóstoles se  identificaron como siervos de  Jesucristo Rm.1:1; 2º Pe.1:1; St.1:1. El deber del siervo es servir y obedecer a su señor; el siervo se limita en hacer lo que le dice su señor; no puede darse privilegios amenos, que su señor le  conceda ciertos privilegios.
2º Ser jefes. Frustrados, porque nadie quiere ser dominados; si en lugar de  sirvo, te colocas en lugar de  jefe, tendrás un ministerio de frustración. Los jefes mandan, ordenan y dominan. Los jefes suelen ser malvados, egoístas y arrogantes; los jefes siempre están en por encima de los demás.
¿A qué, nos llamó el Señor?
Jesús nos llamó a ser siervos; este mundo necesita de siervos que imiten a su Señor, que haga la obra que El hizo; servir. El Señor, no nos ha puesto en su iglesia para dominarla sino, para servirle; el pueblo cristiano debe aprender e imitar a los siervos de Dios, que sí son verdaderos servidores, y saben lo que significa servir. Tener un ministerio de siervos, es tener un ministerio de éxito. Para esto nos llamó el señor para servir.
 Calif. (BP) -- El servicio a los demás es la característica esencial del liderazgo de acuerdo a los estándares divinos. De hecho, el líder cristiano debería ser el siervo de los siervos de Dios (servus servorem Dei, en latín). Todos somos llamados a servir a nuestro prójimo, pero aquellos que tienen el privilegio de ser líderes tienen la obligación de recordar que su liderazgo es un ministerio a otros y que existen por el bien de los demás y no por el suyo propio. Un líder cristiano que no sirve a otros, no sirve para ser líder.
El pastor, Octavio J. Esqueda dijo lo siguiente: “Es obvio que comúnmente no se relaciona al servicio con el liderazgo. Es más, muchos consideran que un líder es aquel al que la gente le sirve y no al revés. Esta percepción es global y ha existido a lo largo de la historia en cualquier cultura. Jesús mismo lo reconoció al afirmar "Como ustedes saben, los que se consideran jefes de las naciones oprimen a los súbditos, y los altos oficiales abusan de su autoridad" (Marcos 10:42, versión popular). Muchos aspiran a posiciones de influencia para ser servidos. El poder que da el ser líder es bastante atractivo como bien lo refleja la siguiente frase popular "es importante ser agradable, pero es más agradable ser importante". Para la mayoría, un buen líder es aquel que tiene influencia sobre otros y que logra que lo sigan y obedezcan”. 
En la parábola del Señor que estamos estudiando, Él dijo que,  el trabajo es duro (aunque no para todos), “arando”  “o apacentando ganado” (Lc.17:7) desde el amanecer al anochecer. El siervo, soporta el agotamiento físico y el cruel calor del día; en el invierno, la  helada y el frio despiadado pero, el siervo no puede mirar por eso, el debe cumplir las órdenes de su Señor, es siervo.
Cuando llega la noche, luego de darle agua a los bueyes y el pasto, y luego de higienizarse, todavía debe preparar la cena para su Señor (V.8). el siervo no puede  pretender que su Señor le dé las gracias; es su deber hacer lo que se le  ordenó (Mr.16:15; Mt.28:19-20).
Ministerio De Querubín
“…Concédenos que en tu gloria nos sentemos el uno a tu derecha, y el otro a tu izquierda” (Mr.10:37). El Señor Jesús les contesto que ellos no sabían lo que pedían (V.38). ésta no era la voluntad y ni el propósito del Señor para con sus siervos; el Señor les  estaba mostrando ejemplo de servicio que El había hecho en medio del pueblo, y ellos querían ocupar el lugar de los querubines, sentarse en tronos de  gloria; esa era una petición de gobernantes y no de siervos.
El Señor dijo que entre vosotros no será así (Mt.20:26). Como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos (V.28).
El tiempo para la recompensa de los siervos está bien  cerca ¿Por qué insistir en el error? Sin embargo, la misma Palabra de Dios nos dice: “…Siervo malo y negligente…” (Mt.25:26). Todo esto están escrito para nuestra advertencia pero aun así, hay muchos siervos malos  y negligente; son pastores policía, comisario o magnates de alfombras rojas.
¿Cómo un líder debe ver el liderazgo de servir?  
El líder servidor  ve  el liderazgo de la misma manera que un carpintero ve un martillo. Un martillo es un instrumento - muy importante. Se puede utilizar para construir, para crear, para hacer realidad un sueño. Y con un mal golpe, puede tener un dedo muy adolorido.
El liderazgo, también le permite a uno desarrollar sueños. Abre puertas y permite que las oportunidades se hagan realidad. Sin embargo, es algo con lo que se debe tener cuidado. Así como con el martillo, los errores pueden ser costosos, y peor aún, el liderazgo, al igual que el martillo, puede ser usado para destruir en lugar de crear; para herir a la gente en lugar de ayudarles. Si no se pone la debida atención, puede también destruir al líder.
El servidor que es prudente, entonces, es tan cuidadoso con este poder como lo sería con el martillo, siempre tratando de asegurarse de dar en el clavo         ¿o en el dedo? Cuida  tu liderazgo como el carpintero cuida el martillo cuando trabaja.
El Pastor Daniel Dice lo siguiente:
definición de “siervo” :
El siervo de Dios es aquella persona que está dispuesta a:
* hacer lo que Dios pida
* cuando El lo pida
* donde El lo pida
* no importa lo que El pida


Reinaldo Diaz

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